Carlos Sánchez salió ayer y tiene previsto llegar el sábado. El partido, en el que jugará Joaquín, su hijo, será el domingo.
Jujuy al día ® – El acuerdo de Joaquín con Jujuy Básquet para jugar la Liga Argentina cambió la hoja de ruta de su papá, Carlos “Flicu” Sánchez, que descubrió el “mundo motoquero” y esta vez eligió salir en dos ruedas hasta el norte de nuestro país, para ver en vivo el partido de la temporada que abrirá la segunda categoría del básquetbol argentino, entre el local e Independiente BBC de Santiago del Estero.
“Unos amigos viajan hasta Camboriú y nosotros, con un grupo, íbamos a acompañarlos hasta las Cataratas del Iguazú y volver, pero en mi caso, Joaquín arregló para jugar en Jujuy y le propuse al resto ir a Catamarca. Entonces, viajó solo hasta Jujuy, veo el debut el domingo y el 16 bajo hasta Catamarca para encontrarme con otras siete motos que salen de acá”, le detalló él “Flicu” a “La Nueva”.
Con 55 años, este ex basquetbolista, nativo de Punta Alta y actualmente empleado de la AFIP, disfruta de lo que conoció después de la pandemia.
“Nunca había andado en moto, aunque tenía locura. Me compré una Beneli 250, de calle, la retiré de la concesionaria sin saber andar, je. Y después de un tiempo me fui a San Luis, la dejé y me compré la actual, una Benelli TRK502X, Trial. Ya llevo unos 45.000 kilómetros recorridos. Me considero un motero, je”, asumió “Flicu”.
Esta segunda experiencia de unir puntos lejanos, primera en soledad, incluye dos paradas antes de llegar a destino.
“Tengo previsto hacer noche en Río Cuarto y después en Termas de Río Hondo. Y para el tercer día me quedarán unos 500 kilómetros hasta llegar a Jujuy. En total son 1.900 kilómetros. Serán unas 60 horas en total”, puntualizó.
«Flicu» ya lo vio jugar hasta en España e Italia, aunque ahora demorará más tiempo en llegar, a pesar de estar dentro del propio país.
“Trato de acompañarlos a él y a Nico (el mellizo, actualmente jugador de Napostá), pero siempre con el mismo objetivo, disfrutarlos. Y esta combinación me permite viajar en moto a una ciudad tan linda como Jujuy. El año pasado estuve dos o tres noches y me encantó. La intención es llevarlo a recorrer un poco el día posterior al partido, hasta Purmamarca y Tilcara”, adelantó.
El regreso, «Flicu» tendrá la oportunidad de unirse en otra experiencia viajera y deportiva con, entre otros, Dardo Martínez, papá de Gonzalo (actualmente jugador de Estudiantes) y Walter Benítez (ex Estudiantes).
“El año pasado con algunos de los que viajan ahora fuimos hasta Machu Pichu, llegamos hasta las Líneas de Nazca, en la costa del Pacífico, y bajamos por Chile”, recordó.
“Viajar en moto es algo indescriptible, difícil de transmitir lo que se siente. El espíritu del viaje, juntarte con amigos, programar, preparar todo reducido por el poco espacio que hay… Y después los lugares a los que accedés, conociendo paisajes que no serían posible en un viaje tradicional, disfrutando la sensación de libertad en la ruta y el compartir. El mundo motero es muy solidario”, aseguró.
A todo esto, por si fuera poco, “Flicu” le suma el reencuentro con su hijo para verlo jugar en el inicio de otra experiencia en el básquetbol argentino. ¿Qué más puede pedir? Buen viaje…
