Jujuy al día® – En el marco de la tercera campaña nacional de detección de hepatitis C, nuestro medio entrevistó a la referente del programa de control de hepatitis virales de Jujuy, Susana Ceballos, quien resaltó la importancia de la detección temprana de estas patologías las cuales, en general, son asintomáticas y al detectarse ya se encuentran en etapas avanzadas.
En la mañana de ayer se llevó a cabo la jornada donde se realizaron test rápidos de detección de hepatitis C y además análisis de detección de hepatitis B.
Susana Ceballos manifestó en declaraciones al diario JUJUY AL DÍA® que “estas son enfermedades crónicas sin sintomatología, por lo que la única manera de detectarlas es con un análisis. Por eso estamos acá buscando a las personas portadoras del virus porque son enfermedades crónicas de 10 o 15 años de evolución y cuando atendemos a los pacientes ya están en etapas avanzadas de la enfermedad y la verdad estamos lejos de poder hacer algo por los pacientes”.
Acerca de las vías principales de transmisión, Ceballos comentó “la transmisión sexual es la principal en el caso de la hepatitis B y la sanguínea para la C. El tema de las transfusiones es algo que ha perdido importancia porque los bancos de sangre tienen test efectivos, por eso este tipo de transmisión tiene vigencia en los usuarios de drogas endovenosos, también podrían ser vías en los tatuajes, de piercing, estudios odontológicos, es decir aspectos relacionados con la bioseguridad”.
Respecto a la cantidad de personas que podrían tener estas patologías en Jujuy, la especialista señaló “no tenemos datos de Nación y provincia, pero desde la Organización Mundial de la Salud refiere que Argentina el 1% de la población puede tener hepatitis crónica B y C”.
Consultada acerca de la efectividad de la vacunación para la prevención de estas patologías crónicas, Susana Ceballos expresó “una enfermedad infecciosa hay que prevenirla y la vacuna es el método más efectivo. El gobierno nacional implementó la vacunación obligatoria para los recién nacidos a partir del 2000 por lo que nuestros jóvenes de 16 y 17 años están protegidos pero quedaba un grupo etáreo de entre 25 a 35 que no y que pueden ser pacientes con hepatitis agudas a ese edad y no estaban protegidos, por lo que a partir del 2012 se amplió la cobertura de vacunas a mayores de 20”.