Jujuy al día® – El diputado Alberto Bernis calificó de lenta la reacción del ministro de Producción Gabriel Romarovsky en cuanto a declarar la emergencia agraria en la provincia de Jujuy porque la sequía golpeó muy fuerte al sector productivo de la provincia, “no tomemos a la ligera el tema, hay fuentes de trabajo en juego, hay un desarrollo de la economía en juego hay productores que no saben qué hacer” advirtió el legislador durante la última sesión.
Durante la 6ta sesión ordinaria de la Cámara de diputados tomo estado parlamentario un proyecto del Bloque radical impulsado por el Vicepresidente Segundo de la Cámara Jorge Rizzotti en el que solicita declarar la emergencia agraria, la iniciativa intenta subsanar los daños que actualmente ocasiona a productores de toda la provincia de Jujuy la situación de escasa agua en el suelo, insuficiencia que afecta a plantas, animales y previsiones productivas.
En cuestiones posteriores al orden del día Rizzotti solicitó que el moción de preferencia para que el proyecto de ley en cuestión, sea tratado con despacho de comisión en la próxima sesión, pedido que fue denegado por el bloque oficialista.
En su intervención Bernis dijo que el radicalismo no pretende sacar ventajas ni politizar el tema de la sequía y que solo pretenden darle un “empujón” al Ministro de Producción de la Provincia que está “dormido”, para que declare urgentemente la emergencia agraria, ya que la situación es “alarmante”.
Señalo luego que los sectores que producen caña, soja, poroto y trigo son quienes están viviendo una situación muy grave y que la misma puede tener como consecuencia que mucha gente quede sin trabajo y la consecuente falta movimiento de dinero en la provincia.
“No estamos de acuerdo la manera en que esta situación está siendo manejada por el Ejecutivo, están lentos porque no declararon la emergencia”, insistió el jefe de la bancada radical.
En el proyecto de ley el radicalismo solicita que se actúe de acuerdo a la ley provincial 4097 que prevé hacer frente a la urgencia a través de la declaración de emergencia, la que implica la ayuda a productores afectados por la sequía a través de créditos y beneficios impositivos y que se ejecuten medidas de acción inmediata conducentes a minimizar los daños.