Jujuy al día® – Pasaron once años de la peor crisis política y social después de instalada la democracia, que nos dejó el triste saldo de 36 argentinos asesinados los días 19 y 20 de diciembre de 2001.
Solo seis detenidos fue la respuesta de la justicia y de la clase política argentina. El resto permanece impune.
El hambre y los saqueos fueron respondidos con cárcel, palos y balas. El estado de sitio dictado por De la Rúa, el 20 de diciembre, no fue otra cosa que el marco legal para detener a 4.500 personas en todo el país y permitir el asesinato de 36. Argentinos. Inocentes. Desesperados. Cinco presidentes se sucedieron mientras las cacerolas se agitaban al grito de “que se vayan todos”.
Muchos se fueron, pero las víctimas y sus familiares no. Se quedaron a llorar su impotencia y soledad. Hoy, a once años de la tragedia, siguen llorando. La mayoría no sabe quién ni por qué mató a sus padres, a sus hijos, a sus hermanos.
36 fueron las victimas con el siguiente detalle: 12 en la provincia de Buenos Aires, 9 en Santa Fe, 7 en la Capital Federal, 3 en Entre Ríos, 2 en Córdoba y 1 en Tucumán, Corrientes y Río Negro.
Siete eran menores de edad. Los más chicos, Rosa Eloísa Paniagua y David Moreno, apenas tenían 13 años.
El listado de los asesinados es:
Graciela Acosta. Carlos Almirón. Ramón Arapi. Rubén Aredes. Elvira Avaca. Diego Avila. Gustavo Benedetto. Walter Campos. Jorge Cárdenas. Juan Delgado. Víctor Enrique. Luis Fernández. Sergio Miguel Ferreyra. Julio Flores. Yanina García. Ariel González. Roberto Gramajo. Pablo Guías. Romina Iturain. Diego Lamagna. Cristian Legembre. Claudio Lepratti. Alberto Márquez. David Moreno. Miguel Pacini. Rosa Paniagua. Rubén Pereyra. Damián Ramírez. Sandra Ríos. Gastón Riva. José Rodríguez. Mariela Rosales. Ariel Salas. Juan Torres. José Vega. Ricardo Villalba.
En su recuerdo y memoria marcharemos miércoles 19 de diciembre a horas 11,00 por calles céntricas y finalizaremos en un acto en plaza Belgrano.
No olvidamos ni perdonamos y solicitamos juicio y castigo y cárcel común para los responsables que aún se mantienen impunes.